La casa diseñada por el profesor Peter Gabrijelcic se sienta en una pequeña parcela de tierra de Eslovenia. Por un lado, hay un asentamiento caótico de suburbios y, por el otro, se encuentra la llanura pantanosa del parque Barje, una interconexión de los prados, campos y cunetas, con un magnífico aumento de montaña en el fondo. El espacio está salpicado de diversos tipos de viviendas y talleres del comerciante con sus astilleros.
Longitudinal de la casa fue consebida como una pared para lograr crear la intimidad de sus residentes, y al mismo tiempo que ofrece un compromiso con la co-existencia de las estructuras ampliamente divergentes de la zona. Se asemeja a un nido, bien acomodados, protegidos y ocultos, pero al mismo tiempo benevolente con la naturaleza, la apertura y la amplitud.
La longitudinal de la pared es de 40 metros, tiene dos funciones. Que marca el límite de la parcela de la, fijado su margen exterior - fuera de la vista de la calle pública, para los que habitan en ella - y, al mismo tiempo, en el interior, alberga un espacio de almacenamiento a lo largo de toda su longitud.
Entre la pared y el resto de la casa corre un pasillo iluminado por luz natural a largo tragaluz. Junto con el edificio, hay una gama de funciones, tales como la entrada, cocina, salón, dormitorios y talleres.
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